Jesús Fernández estará de baja alrededor de tres semanas por un esguince
Rubén Perelló está contento con el trabajo que su equipo está realizando en los últimos partidos. Tres victorias consecutivas avalan ese compromiso que están demostrando sus jugadores y quiere que el partido de mañana ante el Melilla Baloncesto sea una prueba más de esa responsabilidad que está asumiendo su equipo. “Vamos con ilusión porque llevamos tres victorias consecutivas y creo que el equipo está en una línea ascendente de juego y que mejor manera de refrendarlo que en Melilla. No obstante, sabemos que es un partido trampa porque es su última bala para intentar aferrarse a la salvación y lograr posición de play out”, asegura el entrenador lucentino.
Melilla es colista de la competición, de ahí que cada partido para ellos sea una auténtica final a estas alturas de la temporada. “Ocupa la última posición con cuatro victorias y los siguientes son Coruña y Ourense, que están en siete, así que a falta de seis jornadas para Melilla el partido de mañana es su última bala. Esperamos a un Melilla que, además, recupera a jugadores importantes como Selakovs y Pakamanis; un Melilla muy fuerte en casa y que, aunque ha perdido muchos partidos, es engañoso porque en los últimos cuatro ha estado muy cerca de la victoria. Su problema creo que está cuando llegan esos momentos finales, donde la ansiedad les supera y es cuando tienen problemas, así que esperamos llegar a esos momentos con el partido igualado y pudiendo dar un golpe sobre la mesa”, señala el técnico.
Y es que a pesar de la posición que ocupa el Melilla en la clasificación, es uno de los equipos con mejores estadísticas y valoración de la Liga: “Es uno de los mejores equipos en estadísticas, está hecho para intentar subir, pero esta temporada una racha negativa les ha hecho entrar en una dinámica en la que no les salen las cosas. Es un detalle curioso que estén últimos en la clasificación pero en los puestos de arriba en cuanto a valoración, pero es que hacen cosas muy buenas y todos sus jugadores suman. Francis Sánchez es un referente en Melilla y en la liga, de los mejores jugadores a nivel nacional en España. El fichaje de Scott les ha venido bien porque tiene calidad y talento para asumir tiros importantes. En general es una plantilla equilibrada pero que no está teniendo la suerte necesaria”.
Respecto a sus jugadores, Rubén Perelló puede contar ya al 100% con Pedro Rivero, que el pasado domingo ya disputó algunos minutos, pero cuenta con la baja de Jesús Fernández, lesionado el pasado martes en el entrenamiento. “Estamos un poco preocupados porque Jesús Fernández tiene un esguince y lo perderemos para las próximas semanas. Para nosotros es una baja importante que en estos últimos partidos había dado un paso adelante y jugando con confianza, pero esperemos que su recuperación sea lo más pronto posible porque ahora mismo el equipo necesita de su aportación en ataque y porque esperemos que nos de un plus en el Play Off. Toda lesión hace que otros jugadores tengan que echarse a sus espaldas su trabajo y el de sus compañeros y puede ser un buen momento para que otros jugadores intentando demostrarnos que quieren contar con más minutos y que pueden ser importantes para el equipo”, destaca el entrenador.
Respecto a Rivero, “es ya uno más de la plantilla. En ningún momento se ha quejado de dolor ni molestia y está entrenando al 100%, bueno yo diría al 125% porque parece que ha vuelto con más energía y con ganas de dar un plus de intensidad y de actitud al equipo que siempre viene bien para que nadie se relaje, que no bajemos los brazos y que tengamos todos las pilas cargadas para lo que nos viene”, mantiene Perelló.
Jesús Fernández estará de baja alrededor de tres semanas por un esguince
El pasado martes, Jesús Fernández se produjo un esguince en su pie derecho. Durante el entrenamiento vespertino, el jugador saltó y cayó sobre un compañero lesionándose su tobillo.
Tras realizarle una radiografía que descartó la rotura, se comprobó que tenía un esguince y que estará de baja alrededor de tres semanas, dependiendo de la evolución de la lesión.